Un refugio moderno entre la luz y la naturaleza. En esta pequeña urbanización se alzan tres villas únicas que reinterpretan la esencia mediterránea. Sus muros blancos y la nobleza de la piedra dialogan con el verde del entorno, creando una arquitectura serena y atemporal.
Cada vivienda está pensada para vivir hacia el exterior: amplios ventanales que capturan la luz del sol, jardines privados que invitan al descanso y una piscina que prolonga la sensación de calma y frescor.
Son hogares que combinan modernidad y tradición, diseño y confort, donde la vida fluye de manera natural entre lo íntimo y lo abierto.